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jueves, 15 de diciembre de 2011

A mi manera.


Es a mi manera...no lo siento chicos, así va a seguir siendo, porque es lo que me da alegría, me hace sonreír  y me hace feliz, quien no lo entienda es su problema, el mío sería vivir otras vidas.....

Frágil y menuda, pequeña y culona, risueña y rubia al principio de nacimiento y luego ayudada por la técnica, esa soy yo, un suspiro que parece que se rompe, un junco que se dobla con cada trazo de viento que la sacudió, para algunos, un soporte duro y feliz, para los que de verdad me conocen cercana y sensata. Al final irrompible, por ahora, pero sabedora la me puedo romper en cualquier instante.

Sólo el que vive muere, y sólo el que estudia suspende.-Irrumpió la abuela desde el lugar sin nombre.- No lo olvides Esther.

Lo sé Santa, ojalá pudiera abrazarte como hacía tras cada puntualización tuya.


Pista de baile, suena a mi manera, y nos transformamos.

¿Por qué mamá?.

Por qué aprendí a fuego que la única manera de sobrevivir siendo feliz es haciéndolo a MI MANERA.

¿Sin compartir mamá?.

No cariño, compartiendo compresión.

Aguda mamá.

No hija, al final aprendes a encajar los golpes, a entender que el silencio no es mejor que esperar compresión.

A tu manera Mamá siempre a tu manera...¿Hasta cuando?.

Hasta que pueda o lo desee sin más.


Viajé por cada uno de los caminos posibles, experimentándolos.

Mientes mamá...te faltó arriesgar y lo sabes.

Voy a tener un hijo, ¿lo sabías?, te cambio, sin más, sabiOnda.

Ja ja ja...ambas rieron.

Arrepentimientos, he tenido unos pocos...pero no tan importantes como para mendionarlos.

Ahí te doy la razón mamá. Pero no eres tan fuerte como para no haberlos sentido.
Sobre todo me arrepiento de no haber sentido todavía más, de no haber llegado todavía más hondo, a veces, puse el freno de mano demasiado pronto.

Planeé cada trazo de mi rumbo, aunque a veces desee haber planificado diferente, pero sabía que yo era la única responsable, no perdía el tiempo en culpar a nadie, no malgastaba el tiempo, al igual que no lloraba cuando era bebé para no perder el tiempo, sólo observaba y observaba...

Es mi manera no entendida por casi nadie.

Cuando hubo duda, me lo tragaba y escupia, mantuve la frente en alto, sabedora que amé, reí y viví...y lloré, ya lo creo que lloré.

¿A veces te ha tocado perder mamá?.

Por supuesto hija, y dolía, ya lo creo que dolía, pero sabes una cosa, en ese momento, te guiñas un ojo, porque sabes que ese dolor es porque vives, y encima lo haces a tu manera.

Y ahora que he dejado de llorar...que sé que soy yo, lo encuentro todo hasta cachondo, y le doy la belleza que tiene, es mi vida, siempre mi vida la de todos, pero lo olvidamos, preferimos culpar a los demás de lo que es nuestra única responsabilidad, porque la vida es nuestra responsabilidad, nadie piensa en nuestra cabeza, nadie come con nuestra boca, nadie comete nuestros errores, nadie ama u odia por nosotros, lo hacemos nosotros pero pensamos que lo hacen los otros, lo que no existen dentro de nosotros pero le damos una potestad que no tienen.

Pues que es un hombre?..que es lo que ha conseguido? sino se tiene a si mismo, entonces no tiene nada?

Te lo grabaron a fuego mamá.

Simplemente lo vi demasiado pronto, para llegar al momento final sintiéndome traicionada por mí misma.

Decir lo que sientes, vivir lo que sientes y no las palabras de alguien que se arrodilla...

Felicidades a los que viven a su manera, es más sencillo vivir a la manera de los que te rodean, pero yo con la venia, querida amante a los que todos llaman vida, me quedo a mi manera.

Sembradita mamá, y haciendo amigos.

Hija quien me quiere jamás dejaría de hacerlo por no ser cínica y mediocre.

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