Cenando con dos
amigas me han contado una historia sin desperdicio, de las que todavía
son historias.
Os cuento mi amiga
hace un par de años se enamoró de un Italiano, ella tenía los pies en el suelo
y siempre pensó que no pasaría de un rollico, pero fue a más; le
conocieron sus padres, se quedó en su casa, caía bien, y tuvieron una
historia sólida, una bonita historia, él trabajaba en Barcelona;
inteligente, guapo, con metas, la historia prometía, pero mi amiga siempre
guardaba el as de la desconfianza en la
manga. Era italiano, sinvergüenza y machista, lo tenía todo, pero mi amiga
estaba enamorada, esas cosas pasan chico...y
le pasó con el menos indicado.
Finalmente rompen.
El se instala en Barcelona, luego Valencia, le propone que se marche con él,
ella entiende que dejar su vida, por muy enamorada que estuviera, con el
curriculum que él procesaba, era jugar a un corredor que a priori, perdería, y mi amiga era demasiado sensata para apostar.
Él se marcha y lo lógico; un desfile de novias, de mujeres que desea que
vivan con él, en fin la historia de todos los días, ellos siguen siendo amigos,
a veces se lían...llega un momento, la llama- vente...ya no estoy con
Emma, -que me da igual, -contesta ella, -se ha acabado, son amigos pero Silvia,
que digamos es el nombre elegido para mi amiga, decidió hace un tiempo ya no
acostarse con él, ni liarse, dejarse de homenajes que la hacían recordar
sentimientos que no deseaba...en fin y con esas están cuando la vuelve a
llamar...
"Hey Ragazza,
guapa, verás tengo una triste noticia-. Le cuenta desde el otro lado del hilo
telefónico-.Me tengo que ir a Italia, y no volveré en cinco años...(Italia país
de la Unión Europea...), en fin, tenemos que despedirnos, chiquilla, necesito
verte antes de partir....
Mi amiga sabedora de
que un sinvergüenza es un sinvergüenza, le dice ¿de verdad te vas?
"Que sí...¿me
crees capaz de decirte algo así?...
Mi amiga empieza a
dudar...no puede ser tan mezquino.
Anda vente el fin de
semana, lo pasamos juntos, nos despedimos...
MI amiga cede en su
interior, pero no se lo dice, sigue guardando un as bajo la manga..
A los dos días la
llama..."Oye que no era verdad, que no me voy....-Pero me apetece tanto
verte...
Mi amiga le cuelga
el teléfono...
Yo con la mezcla de
sensatez, romanticismo y socarrona como soy...le he dicho...
Mi amiga digna y
cabreada me ha contestado...ESO NO LO DUDO....PERO ÉL NO ES EL HOMBRE DE LA
MÍA...
-.Las cartas están
en la mesa...mientras vivimos....Jueguen su partida...
Pd; Mataré y no es en sentido
figurado, a cualquier sinvergüenza, sin sentimientos ni escrúpulos, que copien
por haberlo escrito éste modus operanti, no
tengo nada en contra de los sinvergüenzas, de hecho me caen bien, tengo muchos
amigos que lo son, y me río y divierto con ellos. Pero quiero que piensen que
nadie les pide que se involucren más de lo que pueden, ni que amen más de lo
que desean, pero que aprendan a escuchar un no, y no lo vean como un reto, sólo
es una sentencia ante su falta de responsabilidad con los sentimientos.