Bien hija, muy bien, al principio me quería parar...no lo hice y luego muy bien.
¿Cómo te sientes?.
Al pasar la línea de meta todo eran aplausos, cuando los humanos hacemos algo, por pequeño que sea, nos animamos unos a otros, es como si tratáramos, con nuestros ánimos de valorar el esfuerzo ajeno.
¿Pero eso es bueno mamá?.
Por supuesto, el deporte, el arte, la música, la escritura, al final tiene un público que ensalza lo que les hace inolvidables y distintos....Pero a veces, la crítica destruye el esfuerzo, por envidia, por rabias internas o solamente por no saber comunicarse o ver la vida de otro modo.
Hoy mientras corría y tanta gente anónima me animaba, me acordaba de cada ánimo que me dieron mientras fui fuerte, mientras desafié lo indesafiable, me acordaba de la enorme cuesta, montaña que subí, y lo bonito que fue el valle. Es cierto, mientras corremos, mientras luchamos, mientras amamos, hay muchas piedras, pero alguien te da una botella de agua, alguien te da aliento....y tú le miras, y entiendes que tienes que seguir. A lo mejor nos equivocamos, a lo mejor todo se puede hacer de otra manera, sin duda, pero no la vemos, sólo luchamos por sobrevivir, por nuestras ideas, por nuestros sueños, y sobre todo POR NUESTRO AMOR.
¿ Les echas de menos?.
Cada día, sueño con ellos, con el rincón mágico que construyeron para mí, mis abuelos, consiguieron que brillara y que siga brillando....LA CARRERA DE HOY, como la de mi vida, va por ellos, no bastan los biberones que me diste Santa....eso fue lo que menos esfuerzo te costó, y mira que era uno cada tres horas...Gracias, sino, el biberón de aliento, que me dabais con vuestras miradas, con vuestros eternos abrazos, y con vuestro amor. Me enseñasteis a ser la mejor en MI VIDA, vuestro aliento, vuestras miradas aprobatorias, eran como cada grito de hoy por la gran vía, eran mi hermano chillando vamos Veva, era mi madrina deseándome lo mejor, era mi hermano deseándome suerte. Era Josefina, diciéndome, eres la mejor, eran cada rostro anónimo que hoy gritaba....VAMOS, sin conocerme.
Si hija si, la vida es una carrera, de meta incierta, y que no sabes cuando la vas a cruzas, a penas te señalizan los Km. que te quedan para la meta, a veces desesperan, a veces te sientes volar....pero la meta está siempre lejos, o al menos es que quieres pensar, llegarás mejor, si durante el recorrido te han animado, te han amado y te han dicho lo Bello que es tu paso por la vida.
GRACIAS ABUELITOS. Gracias a cada persona que me he encontrado y encontraré. OJALÁ, os pueda apoyar de la misma manera....Porqué al final, solo cuando miras a los otros corredores y les aplaudes, les animas, valoras tu esfuerzo, sólo cuando aprendes a amar, a fabricar el valle que fabricaron para mí, es cuando te empiezas a sentirte realizada, sólo cuando olvidas las tristezas y amas como te amaron, es cuando empiezas a ser feliz. OS QUIERO.
